Me hizo pensar en lo extraño que es mi país, como es posible que se destinen recursos a incentivar el ocio de la clase "trabajadora" con mayores beneficios, menor trabajo (senadores) con juguetitos tecnológicos de un precio no despreciable (ipads).
Mientras tanto en la otra vereda (deporte de alto rendimiento) nos encontramos con escenario diametralmente opuesto, donde nuestros atletas deben entrenar fuera del país dada la escasez de equipamiento y la falta de apoyo económico.
Pensemos un momento quien nos hace mejor como país, los parlamentarios o los deportistas de alto rendimiento que mojan la camiseta por el país a pesar de las notables dificultades experimentadas en nuestro país.
¿a quien le damos nuestro dinero?
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